ENFERMEDADES DE LA PIEL
Piel de ángel
Cualquier irregularidad de la piel se soluciona preparando una infusión con cuarenta o sesenta gramos de la hierba cabello de ángel en medio litro de agua. Debe tomar varias tazas al día, agregando previamente jugo de limón.
Para una piel de lujo
Por un lado prepare media jarra de agua de rosas, la cual se elabora dejando durante dos días un puñado de pétalos de rosa en un frasco con agua tibia. Concluído este proceso, extraiga la pulpa de unos cuatro pepinos medianos, y mixtúrelos con media jarra de agua de rosas, con una clara de huevo, y con tres copitas de alcohol blanco. Deje macerar durante tres días este preparado cosmético, y después aplíqueselo sobre el rostro todos los días, antes de irse a dormir.
La savia de la santa
En caso de que sufra alguna dolencia en la piel, le sugerimos frotar la parte afectada con savia extraída de la hierba llamada Santa María o garbancillo. Hágalo frecuentemente y sanará. Así mismo es conveniente que se aplique hojas de col frescas, las cuales debe mantener durante cinco minutos.
Consejitos de belleza
Nadie puede negar que la piel es una importante fuente de atractivo personal; pero es muy difícil mantenerla tersa y libre de problemas. Sin embargo, en lugar de gastar una fortuna en cosméticos es muy recomendable que se aplique varias rodajas de pepino cohombro sobre el cutis. También es muy útil mezclar fresas con crema de leche y miel, machacando hasta conseguir un ungüento suave. Ambos remedios debe aplicárselos con frecuencia para mantener una piel hermosa y
sana.
Sálvese con salvado
La piel de los niños, e inclusive la de muchos adultos padece de irritaciones constantes, las cuales puede eliminar así:
vierta un puñado de salvado en medio litro de agua y lávese la zona afectada. Repita hasta que cese la irritación.
Brote de felicidad
Muchas veces, ante algún agente amenazante, el organismo reacciona produciendo brotes en la piel. Debe buscar la causa real de los mismos para, antes que nada, eliminarlos. Para ello prepare una infusión con un puñado de ortiga en medio litro de agua y lave la zona de la piel atacada por la erupción. Habrá luego un brote de felicidad en usted.
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