FATIGA
Resista un huracán
¿Qué hacer cuando la fatiga nos abruma y nos sofoca? Es tan sencillo que parece imposible: un vaso de agua con una cucharada de sal es lo indicado. Después de beberlo se relajará y podrá continuar con sus ocupaciofle.
Hágalo por partes
Si el cansancio se concentra en alguna parte de su cuerpo, masajéeSe con un aceite o una crema suave hasta que se sienta como nuevo.
No agote fuerzas
Si ya no puede más, pero sus actividades no dan espera, es tiempo de que compre una bolsa de maní y la mantenga cerca de usted. Coma todo el que le sea posible ya que le proporcionará gran energía, áparte de que es lo indicado como reconstituyente cerebral.
Delicia medicinal
No le resultará difícil seguir este buen consejo: coma todas las ciruelas pasas que pueda, pues ellas contribuirán muchísimo para eliminar la fatiga.
FIEBRE
Contra fiebres pegajosas
Contra esas fiebres que no quieren abandonar su cuerpo, nuestra primera recomendación es reunir un puñado de esas semillas negras y abundantes que hay en la carne de la sandía, y hervirlas durante siete minutos y luego endulzar con miel de caña o de chancaca. Y esta bebida deberá ser colada e ingerida bien caliente para bajar esas fiebres malignas.
Bájela con una naranja
El jugo de naranja es muy bueno para reducir la fiebre, pues contribuye a la formación de anticuerpos en el organismo, los cuales combaten la infección. Bébalo frecuentemente.
Papa en la frente
La fiebre suele concentrarse de manera especial en la cabeza; por eso una vieja receta recomienda colocar rodajas de papa en la frente, para que a partir de ese punto se nivele la temperatura en el resto del cuerpo.
Cuando su cuerpo arda...
.prepare un jarabe de cebolla, agréguele el jugo de un limón, endúlcelo con azúcar y tómese una taza bien caliente, y dejará de arder.
En la tuna está la solución
Si la fiebre sube sin que nada ni nadie pueda detenerla, entonces prepare una infusión con la cáscara de dos tunas de monte. La medida debe ser ésta: un litro de agua para las dos cáscaras.
Refresco de flores
Una infusión con flores de tilo es excelente para aquellas fiebres ocasionadas por algún resfriado. Asimismo, la infusión con flores de sauco es muy buena para bajar la temperatura, siempre y cuando se la tome muy caliente y antes de acostarse a dormir.
FIEBRE DEL HENO, ALERGIA PRIMAVERAL
No falla
Mixture un puñado de tomillo, uno de mejorana, y uno de naranjo amargo. Vierta una cucharada de la mezcla en una taza de agua hirviendo, deje reposar diez minutos y cuele. Consuma una taza todas las noches antes de acostarse, durante un mes. Sus efectos sobre la fiebre del heno son infalibles.
FLATULENCIAS
Para gases impertinentes
Las flatulencias, también conocidas como “gases”, son imprevisibles y, por lo general, inoportunas. A las personas propensas a padecer estas inconveniencias se les recomienda tomar constantemente agua de apio caliente, y así evitarán sonrojos
y situaciones incómodas.
Mejore su digestión
Una mala digestión ocasiona múltiples problemas, unos más evidentes que otros, pero todos igualmente bochornosos. Para estimular las vías digestivas y tonificar el estómago, ingiera cuatro veces al día agua de tomillo. Separe los cogollos y cocínelos en un litro de agua por espacio de diez minutos; agréguele miel o azúcar y tendrá un excelente remedio.
Aparentemente inofensivas
Pocos saben que las flatulencias pueden agravar a una persona hasta obligarla a ir a la sección de urgencias de un hospital, pero así es. Por eso debe cuidarse tomando agua de hinojo todas las noches. Si se siente muy afectado por esta molestia, entonces necesita ingerir un litro diario de la misma infusión, repartido en tres dosis iguales.
FLEBITIS
Apio para las venas
Para curar, o por lo menos para aliviarse de la flebitis, que es una complicación de la várices, lo aconsejable es beber durante varios días el cocimiento de la parte blanca de diez tallos de apio. Proceda así: hiérvalos durante cinco minutos, cuele el líquido y póngalo a serenar y al final añádale el jugo de dos limones grandes.
FLUJOS VAGINALES
Cuidados íntimos
Los flujos vaginales obedecen a múltiples factores, razón por la cual son muy comunes. Puede evitarlos preparando un cocimiento con malva, borraja y limón, con el cual debe aphicarse lavados diariamente.
¡Jamás falla!
Mezcle un trozo de corteza de roble y una taza de infusión de tomillo; vierta todo en agua y póngala a hervir durante tres minutos. Luego dése un baño de asiento diariamente y jamás volverá a tener señales de flujo vaginal. Si la molestia permanece entonces debe consultar a un médico.
FORUNCULOS
Intrusos en la piel
Esos granitos tan dolorosos, que aparecen el día menos pensado, son muy débiles si se enfrentan a las cataplasmas de cebolla. Lo único que tiene que hacer es asar un par de cebollas y machacarlas; así obtendrá una especie de ungüento que al ser aplicado sobre el forúnculo lo ablanda y acelera la supuración.
Adiós molestias
Los forúnculos son una incomodidad que usted puede evitar comiendo todos los días una abundante ensalada de tomate, aderezada con ajo, cebolla y cinco cucharadas de aceite de oh- va. Y si quiere atacar por todos los frentes, consuma una manzana rallada antes del desayuno y evite las bebidas estimulantes como el café y el té.
Sencillísimo
Uno de los remedios más usados por nuestras abuelas era el bicarbonato, debido a su gran poder curativo, especialmente en las afecciones de la piel. Puede espolvorearse simplemente sobre la parte afectada, o mezclarse con agua destilada para realizar baños diarios.
Pañitos de agua tibia
Deshágase de los forúnculos, hirviendo agua con unos sobrecitos de sulfato de magnesio; después ponga paños tibios de esta solución sobre la piel, y despídase de las molestias.
No se olvide de la lechuga
Ablande en agua hirviendo un par de hojas de lechuga, haga
una plasta, y aplíquela sobre los forúnculos para madurarlos.
FRACTURAS
“Suelda-suelda” y mucha paciencia
Mucha gente sostiene que cuando se presenta una fractura es bueno acudir a una hierba llamada muérdago, que también se Conoce con los nombres de solda-solda de k’aska-k’asca, liga o jamillo. Con ella se hace un emplasto que se coloca tibio sobre el lugar donde haya sufrido el accidente; se deja así durante varios días y luego se repite el proceso. Encontrar esa planta no es demasiado difícil.
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